Todos hemos sentido dolor alguna vez. Es una sensación difícil de definir porque cada uno lo vivimos, expresamos y afrontamos de una manera distinta.
La mayoría de las veces nos salva la vida: aparece como señal de aviso de que algo no va bien y nos facilita la detección de las enfermedades. Si lo piensas bien, es el principal motivo por el que solemos acudir al médico… Sin estas señales dolorosas sería muy difícil el diagnóstico temprano y la curación de enfermedades.
El dolor también nos protege: es la señal de alerta que nos hace tomar precauciones ante un daño. Sin él, sería muy difícil sobrevivir: el dolor nos hace retirar la mano del fuego evitando que la quemadura sea mayor y nos hace conscientes de las heridas…
Pero en otras ocasiones el dolor pierde su sentido protector y se convierte en sí mismo en causa de sufrimiento llegando a ser una enfermedad…
Estas páginas tienen como objetivo ayudarte a comprender qué es lo que estás sintiendo, por qué te ocurre y qué alternativas tienes para volver a vivir tu vida de antes cuando no te acompañaba el dolor.
La información ofrecida en esta web tiene carácter puramente informativo y NO PRETENDE en ningún caso sustituir las recomendaciones del personal sanitario especialista en dolor.
Entendiendo el dolor
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